New California Laws Make Food Packaging & Children’s Products Safer

New California Laws Make Food Packaging & Children’s Products Safer

By Kathy Attar, Program Manager, Eco-Healthy Child Care®

November 2021

In October, California enacted several laws that will ban the use of toxic “forever chemicals” in children’s products and disposable food packaging. This is a win for the environment and children’s health!

Perfluoroalkyl and polyfluoroalkyl substances (PFAS) are a group of toxic chemicals linked to kidney, liver, developmental, and reproductive issues. These chemicals contaminate waterways via firefighting foam and are primary ingredients in household products like nonstick pans, toys, makeup, fast-food containers, and waterproof apparel.

They are known as “forever chemicals” because they do not break down in the environment and build up in the blood and organs.

Food is considered a major source of exposure to PFAS. Because PFAS coating on infant car seats and bedding wear off with time, the toxicants can get into dust that children might inhale, making contaminated children’s products another exposure avenue.

The California laws (AB 1200 and AB 652) ban PFAS from paper, paperboard (or plant-based food packaging), utensils, and paper straws, effective January 1, 2023. They also prohibit the use of PFAS in children’s products, such as car seats and cribs, beginning on July 1, 2023.

The laws require manufacturers to label cookware that contains toxic chemicals on product handles or coatings, starting January 1, 2024. And, beginning in 2023, manufacturers will also have to make public on their websites a list of harmful chemicals present in their pots, pans, and other cookware.

The California laws follow Connecticut, Maine, Minnesota, New York, Vermont, and Washington in the list of states banning PFAS from food packaging.

To reduce your exposure to PFAS chemicals in food packaging immediately you can:

  • Avoid microwave popcorn and greasy foods wrapped in paper.
  • Take fast food out of its wrapper or containers as soon as possible.
  • Transfer food to glass, porcelain, or microwave-safe pottery plates before heating leftovers in the microwave.

For more Eco-Healthy Child Care® tips take our Protecting Children’s Environmental Health e-course. Child care professionals can receive adult learning clock hours for completing the course.


Las nuevas leyes de California hacen que el envasado de alimentos y los productos para niños sean más seguros

En octubre, California promulgó varias leyes que prohibirán el uso de “químicos permanentes” tóxicos en productos para niños y envases de alimentos desechables. ¡Esta es una victoria para el medio ambiente y la salud de los niños!

Las sustancias perfluoroalquilo y polifluoroalquilo (PFAS) son un grupo de sustancias químicas tóxicas relacionadas con problemas renales, hepáticos, de desarrollo y reproductivos. Estos productos químicos contaminan las vías fluviales a través de la espuma contra incendios y son ingredientes principales en productos domésticos como sartenes antiadherentes, juguetes, maquillaje, recipientes de comida rápida y ropa impermeable.

Se les conoce como “sustancias químicas permanentes” porque no se degradan en el medio ambiente ni se acumulan en la sangre y los órganos.

Los alimentos se consideran una fuente importante de exposición al PFAS. Debido a que el recubrimiento de PFAS en los asientos de automóvil para bebés y la ropa de cama se desgasta con el tiempo, los tóxicos pueden entrar en el polvo que los niños podrían inhalar, lo que hace que los productos para niños contaminados sean otra vía de exposición.

Las leyes de California (AB 1200 y AB 652) prohíben el PFAS en papel, cartón (o envases de alimentos a base de plantas), utensilios y pajitas de papel, a partir del 1 de enero de 2023. También prohíben el uso de PFAS en productos para infatiles, como asientos de automóvil y cunas, a partir del 1 de julio de 2023.

Las leyes requieren que los fabricantes etiqueten los utensilios de cocina que contienen químicos tóxicos en las manijas o revestimientos de los productos, a partir del 1 de enero de 2024. Y, a partir de 2023, los fabricantes también tendrán que hacer pública en sus sitios web una lista de productos químicos nocivos presentes en sus ollas, sartenes y otros utensilios de cocina.

Las leyes de California siguen a Connecticut, Maine, Minnesota, Nueva York, Vermont y Washington en la lista de estados que prohíben los PFAS en el envasado de alimentos.

Para reducir su exposición a los productos químicos PFAS en los envases de alimentos inmediatamente, puede:

  • Evitar las palomitas de maíz para microondas y los alimentos grasosos envueltos en papel.
  • Saque la comida rápida de su envoltorio o envases lo antes posible.
  • Transfiera los alimentos a platos de vidrio, porcelana o cerámica aptos para microondas antes de calentar las sobras en el microondas.

Para más consejos de Eco-Healthy Child Care® tome nuestro curso electrónico Protección de la salud ambiental de los niños. Los profesionales del cuidado infantil pueden recibir horas de aprendizaje para adultos

Emergency Preparedness and Child Care

Emergency Preparedness & Child Care

By Kathy Attar, Program Manager, Eco-Healthy Child Care®

September 2021

The COVID-19 pandemic placed a spotlight on the child care community and the need for improved health and safety practices, policies, and planning–AND more funding for these essential workers. The child care workforce was placed at heightened risk during the pandemic, as many remained open without the necessary protocols or supplies that would have kept them safe. 

Child care providers, who are often women of color, and who are of child-bearing age, and low income are already more likely to be exposed to environmental hazards, including chemicals found in cleaning products, or poor indoor air quality. Studies show that black and brown communities are more likely to live in substandard housing and near hazardous waste sites, polluting industries, and mobile sources of pollution including cars, trucks, and ships.

We must do better to protect our children and our workforce.

Each September national preparedness is observed as a way to increase awareness and understanding of the importance of preparing for disasters and emergencies or the next pandemic. This is a great opportunity for child care providers to assess their readiness. Each week in September, the campaign will focus on a different aspect of preparedness for individuals, families, and communities. The Ready Campaign organizes the annual event. 

There are many great free resources to assist child care professionals in becoming emergency prepared. 

Child Care Aware of America (CCAoA) has fact sheets on what child care providers and Child Care Resource and Referral (CCR&R) agencies should include in their emergency supply kit. CCAoA also has developed an emergency preparedness checklist for providers.

Head Start has an emergency preparedness web page with tip sheets and an Emergency Preparedness Manual for Early Childhood Programs. These resources address the social and emotional needs of children and staff as well as the development of emergency plans.

The Agency for Toxic Substances and Disease Registry’s Choose Safe Places for Early Care and Education Disaster Recovery Supplement can help environmental and public health professionals protect children from environmental exposures after a disaster. The supplement helps identify environmental exposures that might harm children while they are in child care.

Child care providers who would like to receive monthly updates on best practices for keeping their child care free of environmental hazards should sign up for Eco-Healthy Child Care®’s eco-hot tip emails

Eliminating environmental hazards like poor indoor air quality will help keep children and child care providers healthier AND better prepare them for the next emergency.  


Preparación para emergencias y cuidado infantil

La pandemia de COVID-19 puso de relieve a la comunidad de cuidado infantil y la necesidad de mejorar las prácticas, políticas y planificación de salud, seguridad, y más fondos para estos trabajadores esenciales. La fuerza laboral de cuidado infantil se vio expuesta a un mayor riesgo durante la pandemia, ya que muchos permanecieron abiertos sin los protocolos o suministros necesarios que los hubieran mantenido a salvo. 

Los proveedores de cuidado infantil, que a menudo son mujeres de color, y que están en edad fértil, y de bajos ingresos tienen más probabilidades de estar expuestos a peligros ambientales, incluidos los productos químicos que se encuentran en los productos de limpieza o la mala calidad del aire interior. Los estudios muestran que las comunidades negras y marrones tienen más probabilidades de vivir en viviendas de mala calidad y cerca de sitios de desechos peligrosos, industrias contaminantes y fuentes móviles de contaminación, incluidos automóviles, camiones y barcos.

Debemos hacer mejor para proteger a nuestros niños y nuestra fuerza laboral.

Cada septiembre, la preparación nacional se observa como una forma de aumentar la conciencia y la comprensión de la importancia de prepararse para desastres y emergencias o la próxima pandemia. Esta es una gran oportunidad para que los proveedores de cuidado infantil evalúen su preparación. Cada semana de septiembre, la campaña se centrará en un aspecto diferente de la preparación de las personas, las familias y las comunidades. La Campaña lista organiza el evento anual. 

Hay muchos recursos gratuitos excelentes para ayudar a los profesionales del cuidado infantil a prepararse para emergencias. 

Child Care Aware of America (CCAoA) tiene hojas de datos sobre lo que los proveedores de cuidado infantil y las agencias de Recursos y Referencias de Cuidado Infantil (CCR&R) deben incluir en su Kit de suministros de emergencia. CCAoA también ha desarrollado una lista de verificación de preparación para casos de emergencia para los proveedores.

Head start tiene una página web de preparación para emergencias con hojas de consejos y un Manual de preparación para emergencias para programas de la primera infancia. Estos recursos abordan las necesidades sociales y emocionales de los niños y el personal, así como el desarrollo de planes de emergencia.

El Suplemento de recuperación por desastre de la Agencia para Sustancias Tóxicas y el Registro de Enfermedades puede ayudar a los profesionales del medio ambiente y de la salud pública a proteger a los niños de la exposición ambiental después de un desastre. El suplemento ayuda a identificar las exposiciones ambientales que pueden dañar a los niños mientras están en el cuidado infantil.

Los proveedores de cuidado infantil que deseen recibir actualizaciones mensuales sobre las mejores prácticas para mantener su cuidado infantil libre de peligros ambientales deben inscribirse a los correos electrónicos eco-hot tip de Eco-Healthy Child Care®

La eliminación de peligros ambientales como la mala calidad del aire interior ayudará a mantener a los niños y a los proveedores de cuidado infantil más saludables y a prepararlos mejor para la próxima emergencia.  

Climate Change and Childhood Lead Poisoning

Climate Change and Childhood Lead Poisoning 

By Kathy Attar, Program Manager, Eco-Healthy Child Care®

Scientists agree that our climate is changing and that humans are responsible. Climate change is more than just higher temperatures. We already see the impacts of climate change, including severe storms, temperature extremes, and drought

But what does climate change have to do with childhood lead poisoning?

Studies show that children have higher blood lead levels when it’s summer and hotter. In warm weather, windows (often painted with lead-based paint) are opened and closed more, which leads to increased lead dust in the air and on the ground. Repainting and renovation activities also are more common in warmer months. 

Climate change can make childhood lead poisoning worse, particularly in black, brown, and low-wealth communities; and, these communities are often already at greater risk of lead hazards. Climate change has an unequal impact on the aforementioned groups because it is a “threat multiplier.” It layers on top of existing public health, economic, and racial injustices in the U.S.

Black, brown, and low-wealth families are more likely to live in older, substandard housing–housing that is not maintained and has chipping, peeling, or cracking lead-based paint. More days of extreme heat increases the likelihood of lead dust accumulating inside homes and therefore heightens children’s exposures. These communities are also more often living in neighborhoods surrounded by polluting industries or busy roadways, leading to lead in soil contamination.

The need for urgent action on climate change is clear. 

To combat climate change, we must provide resources to communities that need it most. That way, all neighborhoods, and communities can be healthy and safe places to live. To learn more about the health impacts of climate change, what organizations are doing, and how you can get involved, subscribe to the Children’s Environmental Health Network’s weekly e-digest.

For steps, you can take as a parent, child care provider, or home-owner to reduce children’s exposures to lead hazards, visit our FREE Lead-Safe Toolkit. The Toolkit offers a range of resources, including a poster and worksheets that provide easy-to-follow steps for finding out if lead hazards exist in your home or child care and what to do to reduce any exposures.


El cambio climático y el envenenamiento por plomo en la niñez

Los científicos están de acuerdo en que nuestro clima está cambiando y que los seres humanos somos responsables. El cambio climático es más que temperaturas más altas. Ya vemos los impactos del cambio climático, incluyendo tormentas severas, temperaturas extremas y sequías.

Pero, ¿qué tiene que ver el cambio climático con el envenenamiento infantil por plomo?

Los estudios muestran que los niños tienen niveles más altos de plomo en la sangre cuando es  verano y hace más calor. En climas cálidos, las ventanas (a menudo pintadas con pintura a base de plomo) se abren y se cierran más, lo que conduce a un aumento de polvo con plomo en el aire y en el suelo. Las actividades de repintado y renovación también son más comunes en los meses más cálidos. 

El cambio climático puede empeorar el envenenamiento por plomo en la niñez, particularmente en comunidades negras, marrones y de bajos recursos económicos; y estas comunidades a menudo ya corren un mayor riesgo de sufrir los peligros del plomo. El cambio climático tiene un impacto desigual en los grupos antes mencionados porque es un “multiplicador de amenazas”. Se superpone a las injusticias raciales, económicas y de salud pública existentes en los EE. UU.

Las familias negras, morenas y de bajos recursos tienen más probabilidades de vivir en viviendas más antiguas y deficientes: viviendas que no se mantienen y tienen astillas, peladuras o agrietamiento de pintura a base de plomo. Más días de calor extremo aumenta la probabilidad de que el polvo de plomo se acumule dentro de las casas y, por lo tanto, aumenta la exposición de los niños. Estas comunidades también viven con mayor frecuencia en vecindarios rodeados de industrias contaminantes o carreteras concurridas, lo que lleva a la contaminación del suelo con plomo.

La necesidad de una acción urgente sobre el cambio climático es clara. 

Para combatir el cambio climático, debemos proporcionar recursos a las comunidades que más lo necesitan. De esa manera, todos los vecindarios y comunidades pueden ser lugares saludables y seguros para vivir. Para obtener más información sobre los impactos en la salud del cambio climático, qué están haciendo las organizaciones y cómo puede participar, suscríbase al e-digest semanal de Children’s Environmental Health Network.

Para conocer los pasos que puede tomar como padre, proveedor de cuidado infantil o propietario de una casa para reducir la exposición de los niños a los peligros del plomo, visite nuestro Kit de herramientas sin plomo GRATUITO. El kit de herramientas ofrece una variedad de recursos, que incluyen un póster y hojas de trabajo que brindan pasos fáciles de seguir para averiguar si existen peligros de plomo en su hogar o cuidado infantil y qué hacer para reducir cualquier exposición.